lunes, 6 de octubre de 2008

Sitges 2008

Algunas cosas se van y otras vuelven. Vuelvo a ir al Festival de Cine Fantástico de Sitges (o Festival Internacional de Cinema de Catalunya, nombre que no le va), como el año pasado, después de haber estado sin ir más de diez años. En todo este tiempo, sino recuerdo mal, ha habido intentos de convertirlo en un festival de cine a secas, quitando el "fantástico" del nombre, pero creo que no acabaron de cuajar. Sabemos que lo mejor ahora para ofrecer un producto es especializarse. Además, existiendo otros festivales que cubren esas necesidades, y aún entendiendo la aspiración que pudo tener en su momento a ser algo más (porque el género fantástico tiene a veces fama de poco serio, etc, pero eso es otro tema), ¿que mejor para Sitges, que es una población pequeña y sin muchas pretensiones, tener un festival sin muchas pretensiones aparte de ser uno de los mejores de su género? Con su público friki, fiel y entusiasta, y ese ambiente incomparable. Porque ir a Sitges es más que ver pelis, es participar en una especie de comunión de "iniciados".
Mi primer dia es el Sábado 4, y me temo que ya me he perdido (que festival más largo, dios) algunas que me interesaban mucho: Exte: hair extensions, una japo con la japo-adolescente-asesina que aparecía en Kill Bill y unas extensiones de pelo asesinas! (delirante), Ichi, una versión de Zatoichi en femenino (qué buena pinta, no hay nada que me guste más que ver a chicas repartiendo), Los bastardos, de la que he oido hablar muy bien, y el homenaje a Nekromantik. Esta última para mí tenia un punto nostálgico y sentimental ya que hace muchos años (creo que unos quince), pedí a su director Jorg Büttgereit un autógrafo (el único que tengo de un director de cine), porque era bastante fan. Esa mezcla de gore, romanticismo y trascendencia me atraían mucho. De todos modos, puede ver al hombre en cuestión y me alegro mucho de ver que está bien, aunque mucho mayor, claro.
Pero en fin, vamos al contenido. Tengo que decir que estoy limitado a ver solo determinadas películas, y las que tocaron ese dia fueron Monster X Strikes Back. Attack the G8 Summit! y Freedom. Si, muy pocas pero es que Freedom duraba unas !tres horas y media!. Por cierto, ni en el programa de mano ni en el periódico, sino me equivoco, ponia que era una serie de siete capítulos completa. Su director es Shuhei Morita aunque por la pinta parece que sea Katsuhiro Otomo (director de Akira), pero no, lo que pasa es que es responsable del diseño de personajes. De hecho, en cualquier momento estava esperando que apareciera Kaneda en la moto, además de existir una relacion de amistad parecida que la que habia entre Kaneda y Akira, un abuelo clavado, y las carreras en moto de rigor, sólo faltaba la niña chunga con poderes. De la serie (http://www.bandai-ent.com/h/freedom/intro/intro.html) se comenta que mezcla diversas técnicas de animación con virtuosismo y en efecto es así. Es curioso ver como en animación, en el aspecto técnico Japón da mil vueltas a USA. Pero eso ya son lugares comunes, y aunque como digo en ese aspecto la película es más que impecable, la historia para mi gusto flojea un poco. No puedo uno dejar de sentir que está viendo todo el rato elementos, tanto de argumento como de diseño, que le recuerdan a otras películas (¿quizás eso es inevitable dado el gran peso que tienen grandes títulos de la ciencia ficción en nuestro imaginario?). Y es muy, pero muy, adolescente, en su visión de los temas. En todo caso, muy recomendable para todos los interesados en la animación.






Monster X Strikes Back es un homenaje-parodia a las películas Kaiju Eiga (http://www.cinemacafe.net/official/guilala/) dirigida por Kawasaki Minoru, y a la vez una versión de una película de los años setenta si no me equivoco (el monstruo Guilala os resultará familiar a los amantes de este sub-género o lo que sea). Vale, es divertida, y en la presentación aparecieron el director y el productor con una cabecita de monstruo de peluche, y hasta habló en catalán (que mono, por favor), y todo el mundo se rió mucho, sí. Pero para mí, las películas clásicas de monstruos son divertidas en sí mismas, y al hacer una parodia, pues se pierde un poco el sentido, sobretodo si hay unos chistes más zafios de por medio que en una peli de Ozores. A veces parecia el típico chiste de "se juntan un francés, un inglés, y...". Y una cosa que no... no cuela, y es la siguiente: se supone que hay un cameo de Takeshi Kitano haciendo de Dios (le pega tanto!) que lucha contra el monstruo. Como lleva una máscara, la verdad es que podría ser cualquiera, ¿verdad?

Me he sentido tan feliz en Sitges que no descarto volver a hacer cosas como ir al Salò del Còmic. Que no solo de exposiciones y música electrónica sofisticada vive el hombre (y la mujer).
Y añado que en el blog de Ausente (http://absencito.blogspot.com/) leo un interesante comentario sobre los organizadores diciendo que este festival era para ellos el mejor de España y casi de Europa. Se han pasado un poco, pero sí es cierto que parece que todo esto se toma más en serio. También es interesante pensar si acaso su aparente limitación será su grandeza.

No hay comentarios: